Por, Gonzalo Luna, Coordinador causa Evopoli Academia.
La actual pandemia del COVID-19, ha dejado de manifiesto la importancia de los municipios como uno de los principales articuladores entre los problemas de los ciudadanos frente al Estado, demostrando ser además, un eficiente motor para el desarrollo local, en un proveedor relevante de servicios para la mayoría quienes habitan en sus territorios, así como también, en actores claves en temas como la disminución de la pobreza y en materia de desarrollo social.
En el marco de los principios de nuestro partido, vinculados a la construcción de una sociedad de oportunidades y de la promoción de los valores de la diversidad, el respeto y la competencia, los municipios, en su condición de corporaciones autónomas, deben transformarse en activos agentes coadyuvantes en las materias claves en la gestión del Estado, promoviendo la participación económica, social y cultural de quienes la habitan. Sin embargo, la abismante desigualdad en la disponibilidad de recursos y la falta de autonomía de estos con respecto al gobierno central, debido al excesivo centralismo, sumados a su gran heterogeneidad económica y social, hacen necesario el establecimiento de medidas que permitan a los municipios tener los instrumentos que no solo mejoren su gestión interna y externa, si no que además, los constituyan en verdaderos gobiernos locales dentro del aparato de la administración del estado.
Es en este ámbito que se hace necesario la implementación de medidas tales como el mejoramiento de los sistemas de recaudación, distribución y aportes al Fondo Común Municipal (FCM), mejorando la capacidad de los municipios de aumentar sus ingresos fiscales propios; un mejoramiento integral en sus procesos de gestión financiera, transparencia y participación vecinal (fondos concursables) serían instancias óptimas para el manejo fiscal y financiero municipal.
El fortalecimiento de los recursos humanos municipales, mejorando sus competencias y habilidades, junto a una masificación de los instrumentos de participación ciudadana a través de consultas, plebiscitos, y el fortalecimiento de las organizaciones de la sociedad Civil, permitirán transformar los procesos y estructura local.
Finalmente, los municipios deben orientarse a fomentar la generación de proyectos que fomenten la asociatividad público- privada con impacto en varios territorios comunales, tales como seguridad ciudadana, emprendimiento, desarrollo urbano y cultural, entre otros.
Estas y otras medidas, sumados a la reforma del marco legal correspondiente, permitirán a los municipios conformar una gestión de cara a las personas, más acorde a la realidad y necesidades concretas de cada comuna y especialmente a las necesidades de todos quienes las habitan.