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Una serie de viajes y encuentros han tenido en estos últimos meses diversos miembros de Evópoli en el extranjero. ¿La razón? El partido desplegó una estrategia para internacionalizar la colectividad con el resto de los proyectos liberales en el mundo , como «En Marche!», del Presidente de Francia, Emmanuel Macron; el del Presidente de Canadá, Justin Trudeau; Ciudadanos de España y fundaciones como la de Álvaro Vargas Llosa y la fundación alemana Friedrich Naumann.
El primer encuentro fue en enero, en Washington, cuando el timonel de Evópoli, Hernán Larraín Matte, visitó la capital de Estados Unidos y se reunió con el secretario general de la OEA, Luis Almagro, con el presidente del «Inter-American Dialogue», Michael Shifter, y con el intelectual Moisés Naim. En esa oportunidad, además, expuso en el Banco de Desarrollo de América Latina sobre Evópoli.
«Estamos abriendo canales para que el partido esté conectado a redes internacionales y participar en un diálogo respecto del desafío del liberalismo», explica Larraín.
En tanto, hace una semana, el senador Felipe Kast viajó a Santo Domingo, República Dominicana, para exponer en la Red Liberal de América Latina (Rial) sobre Evópoli.
En la colectividad aseguran que la idea no es participar de las organizaciones en las que actualmente forman parte las tiendas chilenas, como la fundación alemana Konrad Adenauer Stiftung, ligada a la Democracia Cristiana, o la Unión de Partidos Latinoamericanos relacionada con la UDI y RN. Su interés estaría en instituciones, precisamente, como la Rial y la Fundación Internacional para la Libertad (FIL), de Álvaro Vargas Llosa.
Otro que ha tenido este tipo de actividades es el jefe de bancada, Luciano Cruz-Coke, quien hizo una gira paralela cuando acompañó al Presidente Sebastián Piñera en su viaje a Europa.
Cruz-Coke se reunió en España con el encargado de las relaciones internacionales de Ciudadanos, Fernando Maura; en París estuvo con representantes del partido del Presidente Macron, y en Alemania con la Fundación Friedrich Naumann. Con esta última se establecieron vínculos formales.
«El foco de Naumann no es solo tener un intercambio internacional intelectual o formativo, sino también generar vínculos políticos. «Lo que buscamos es que estos movimientos o partidos puedan defender en la trinchera política la democracia liberal, la economía abierta y los derechos humanos. La novedad es que son grupos de emergencia reciente», explica el diputado.
Desde la colectividad aseguran que hay una necesidad de generar lazos para defenderse del populismo emergente, tanto a nivel latinoamericano como también mundial.
Por ejemplo, desde Estados Unidos les habrían comentando a miembros de Evópoli que les llamaba la atención que los líderes del movimiento estudiantil hayan terminado siendo parte de partidos políticos y que su representación en el Congreso los hace parte de la «institucionalidad».
Con esto, explican desde la colectividad, Chile sería analizado como un caso positivo de democracia a diferencia de países como Brasil, Hungría o incluso el propio Estados Unidos.
El próximo destino sería Nueva Zelandia. El presidente de la agrupación pretende reunirse con miembros del partido de la actual Primera Ministra de dicho país, Jacinda Ardern.
Fuente: El Mercurio
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