Evópoli presentó una propuesta de «Reforma Tributaria Verde»
Hernan Larraín y Luz Poblete en la actividad de presentación de la iniciativa, en el Parque Balmaceda de Providencia.
🍀 Impuesto a la Emisión de Carbono en Chile y en el Mundo
En septiembre del año 2015, nuestro país se comprometió en disminuir en un 30% las emisiones de carbono para el año 2030, lo que fue ratificado en el marco del Acuerdo de París sobre el Cambio Climático. Para este propósito se han diseñado varias medidas; en base a las cuales; se decidió incorporar un impuesto al carbono a partir del año 2017. El nuevo impuesto que grava las emisiones de CO2, fue establecido con la finalidad de encarecer su uso y reducir las emisiones del mismo. Para ello, se decretó un cargo de U$5 por cada tonelada de CO2, hacia aquellos establecimientos industriales generadores de emisiones desde fuentes fijas, y que sumen –individual o en conjunto- una potencia de 50 megavatios térmicos o más.
En el ámbito internacional, los países que presentan mayor tasa impositiva son Suecia (139 dólares), Suiza (101 dólares) y Finlandia (77 dólares), lo que convierte al impuesto establecido en Chile en uno de los más bajos del mundo, junto a Japón y México. Estudios recientes, entre los cuales se encuentra el de Mardones y Muñoz (2017), concluyen que si se mantiene el cargo de U$5 dólares por tonelada, sólo se reduciría las emisiones de CO2 en 1,32%, y por lo tanto es inminente aumentar el valor del impuesto, ya que de mantener los U$5 dólares no se logrará el objetivo internacional pactado.
En el mismo sentido, según datos internacionales de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE), se advierte que Chile tiene uno de los más bajos ingresos por impuestos pertenecientes al cobro del sector medio ambiental, pues, representó en el 2014 el 1.2% del PIB. A su vez, el promedio de la OCDE es de 2,2%. Esto lo explicaría un bajo gravamen -en comparación con los países miembros de esta organización- aplicados a los combustibles fósiles. Por lo cual, puede concluirse que también hay espacios para incrementar dicho aporte por medio de los “impuestos verdes”.