Aunque es habitual que cada miércoles el presidente del partido, Hernán Larraín Matte, y la secretaria general, Luz Poblete, se trasladen hasta el Congreso en Valparaíso para reunirse con los seis diputados de la bancada, esta vez la cita tenía un sentido «urgente».
Ayer, «El Mercurio» dio a conocer la carta de renuncia de la senadora de Evópoli, Carmen Gloria Aravena, a la vicepresidencia del partido. En esa misiva, que fue enviada el lunes, la parlamentaria manifestó una «profunda decepción» con la colectividad, pues días antes había sido duramente criticada por la Juventud -también en una carta- debido a su postura en contra del matrimonio igualitario.
«Me he sentido abandonada frente a las amenazas y emplazamientos de quienes forman parte de Evópoli. Ni pública ni privadamente me he sentido respaldada. Un partido que se declara diverso no puede ni debe imponer a sus miembros ni menos abandonarlos cuando otros buscan acallar a quienes piensan diferente», dijo la senadora en la carta.
Por eso, Aravena fue convocada ayer al almuerzo del partido, en el que participó por unos minutos. También estuvo presente el senador y fundador Felipe Kast.
«La mesa directiva le solicitó que reconsidere su decisión y que continúe como vicepresidenta», afirmó Larraín Matte al salir de la reunión.
«En un diálogo franco y profundo, la directiva le manifestó su total apoyo. La senadora declaró su voluntad de evaluar esta posibilidad», agregó el presidente de la colectividad.
La renuncia a la vicepresidencia de Evópoli abrió un debate interno. La juventud había escrito en su misiva que la actitud de la senadora era «imperdonable», pues contrariaba los principios del partido, lo que dio cuenta de la existencia de un sector que busca defender primeramente temas liberales como el matrimonio igualitario.
A ese debate también se había sumado la directora de Formación de Horizontal -el centro de estudios ligado al partido-, Valentina Verbal, quien tiene ascendencia en la colectividad y que había conminado públicamente a la parlamentaria a dar argumentos sólidos para estar en contra del matrimonio igualitario. De hecho, en la carta, la senadora Aravena aludió a Verbal y expresó: «Una de nuestras investigadoras me emplaza públicamente a renunciar al partido, me recuerda mi baja representación y con ello cuestiona mi derecho a opinar».
«La directiva quiere precisar que Evópoli es un partido de vocación liberal y no una dictadura liberal. Somos un proyecto plural que, fundado en la libertad, respeta posiciones personales diferentes», dijo Larraín Matte, al ser consultado por el debate interno de Evópoli.
«Desgraciadamente en estos días hemos visto actitudes y manifestaciones puntuales de intolerancia -continuó Larraín Matte- que no contribuyen al clima de unidad que queremos para nuestro partido. El respeto y la diversidad son valores que seguiremos promoviendo».
Fuente: El Mercurio.
